
Una disputa entre dos familias faldenses, desencadenó una noche de furia donde dos familias dirimieron sus diferencias con piedras y cuchillos.
El hecho ocurrido el 21 de octubre de 2018, alrededor de las 22.30 en la calle Brasil y Calle Pública, en cercanías del “Tanque El Vallecito” en el barrio El Dominador, de la ciudad de La Falda, tuvo como consecuencia la muerte de un joven de 18 años y heridas por arma blanca al hermano y al padrastro.
Declaraciones de los testigos aseguran que horas antes del ataque final, los jóvenes de las familias estaban enfrentados por una carrera de motos, que fue el disparador para que la tensión vaya creciendo hasta arrastrar a varias personas al enfrentamiento, por momentos a golpes de puños, en otras ocasiones a los piedrazos, para terminar utilizando un arma blanca en un homicidio.
Durante el «día de la madre del 2018«, se fueron sucediendo enfrentamientos donde participaban miembros de la familia Heredia y Lujan. Según consta en el expediente judicial, todo habría comenzado por una carrera de motos, donde uno de los participantes no aceptaba haber perdido. En distintos momentos de ese domingo, relatan testigos, el atacante pasó con su moto por la vivienda de Lujan, de manera desafiante, en otro momento se tomó a golpes de puño con miembros de la familia Lujan. En esas luchas no estuvieron ausentes las piedras como respuesta a las agresiones.
Automóviles dañados por los piedrazos. Vecinos preocupados. Y una jornada que sin lugar a dudas iba a terminar mal.
Según se estableció, Mayco Matías Heredia (28) junto a su padre Edgardo Gabriel Heredia (57), acompañados de varias personas, utilizando al menos dos automóviles y motos de baja cilindrada, alrededor de las 22.30 de ese domingo, se acercaron al domicilio de la familia Lujan, con la intención de cobrar venganza.
Luego de descender de los vehículos, el grupo de unas diez personas caminó por la calle hacia la vivienda de Lujan. A pocos metros, donde se ubica un comercio, bajo un árbol, tres o cuatro vecinos estaban tomando y conversando. Hasta ese grupo se acerco Mayco y preguntó por Fernando Lujan. En ese momento se acerca Antonio Ángel Lujan y dice: “Que pasa con Fernando, yo soy el hermano”. Esto bastó para que Mayco Heredia lo atacara con la cuchilla Tramontina de 27 centímetros que portaba, dándole cuatro puñaladas en el abdomen.
En esa reyerta, que ya involucraba a varias personas, el agresor Mayco Heredia, utilizando el mismo cuchillo, hirió en el abdomen a Julio César Moyano y de una puñalada certera en el tórax le quitó la vida al joven Fernando Lujan –quien a esa fecha tenía 18 años-.
Los testigos dicen que en ese momento comenzó la batalla campal entre los dos grupos. Una mujer arengaba a quienes estaba acompañando a los Heredia, al grito de “Ataquen, ataquen”.
A los minutos quienes fueron a buscar venganza, se replegaron a su vivienda ubicada en el mismo barrio. Cuando llegó la policía al lugar, luego de diez minutos, encontraron un terrible panorama, dos heridos sangrando y a Fernando que yacía en el piso, sin vida, mientras su novia le sostenía la mano. Ambos heridos fueron trasladados por el servicio de emergencia al Hospital Domingo Funes, donde permanecieron internados hasta recuperarse de sus heridas.
El Doctor Martín Bertone, por ese entonces fiscal de Cosquín, se hizo presente en la escena del crimen, dictando una serie de medidas judiciales, que en pocas horas puso tras las rejas a tres personas sindicadas como participantes del feroz ataque.
En el domicilio de los Heredia se secuestró el arma blanca, que de acuerdo a la declaración de Mayco, “la había encontrado tirada en el lugar” donde se desarrolló la pelea. También secuestraron prendas de vestir ensangrentadas.
La causa llegó a juicio, con solo dos imputados. El 22 de octubre de 2020, la Cámara en lo Criminal y Correccional de Cruz del Eje, en un juicio con jurado popular, llegó a un fallo que determinó la “absolución y puesta en libertad” por falta de acusación fiscal de Eduardo Gabriel Heredia y condenar por “homicidio y homicidio en grado de tentativa reiterado en concurso real a la pena de quince años de prisión” a Mayco Matías Heredia.
Los jueces valoraron dos circunstancias al momento de emitir la condena, como atenuante el arrepentimiento expresado al momento de la confesión, la ausencia de antecedentes penales, la calidad de padre de hijos menores y trabajador; mientras que como circunstancias agravantes la cierta madurez alcanzada, gracias a su educación, trabajo y edad, que le permitía conocer con claridad lo debido y pese a ello optó por delinquir, y también el grave daño causado al haber afectado a tres víctimas, dando muerte a una persona muy joven e intentado dar muerte a dos más ocasionándoles graves heridas.
Por último, se escuchó la palabra del acusado quien expresó: “que reconoce el hecho intimado, que se encuentra arrepentido y que pide disculpas a las víctimas y a sus familiares”.
